Nos hemos pasado la vida escuchando a nuestras madres y abuelas decir que la comida tradicional es la mejor, que debemos comer platos de cuchara y, por supuesto, que no hay nada como las recetas de la abuela. Sin embargo, cada vez es más común preparar recetas rápidas o platos precocinados que no se parecen en nada a la cocina tradicional. Aunque lo mejor es llevar una dieta variada y comer de todo, apostar por la comida tradicional presenta una serie de ventajas indiscutibles. ¿Quieres saberlas? ¡No te preocupes, te las explicamos a continuación!

Beneficios de la comida tradicional frente a opciones de alimentación más rápidas

No olvidemos que comer platos de toda la vida no significa que debamos alimentarnos únicamente de lentejas, cocido o calderos. Las posibilidades son muchas y siempre podemos reinventarnos. Además de cocinar los platos típicos o seguir la receta clásica, podemos darles nuestro propio toque a las comidas, como antaño probablemente hicieron nuestras abuelas.

La clave es cocinar de una forma consciente, responsable y aprovechando los ingredientes. La gracia de la comida tradicional es que esta se prepara de forma casera, lenta y con ingredientes de primera calidad.

La comida tradicional presenta los siguientes beneficios frente a otras opciones como la comida rápida, precocinada o precalentada (un tipo de comida que cada vez se consume más debido a la falta de tiempo o por pereza).

1. Los ingredientes serán de buena calidad y naturales

Cuando cocinas platos tradicionales, puedes elegir ingredientes de proximidad y de primera calidad. Desde frutas, verduras, legumbres o aceite hasta el pescado o la carne; puedes escoger los productos más frescos y saludables.

Cuando comes fuera de casa, decides optar por la comida precocinada o la comida rápida. No sabes, en realidad, qué aditivos o ingredientes tienen las recetas. Si preparas comida tradicional casera, sabes exactamente qué ingredientes estás usando. Tus recetas no tendrán conservantes ni colorantes, estarán hechas con ingredientes naturales.

2. Cocina tradicional para el aprovechamiento y desarrollo del ingenio

Elaborar comida tradicional no solo consiste en preparar recetas de cuchara o que sacien, sino también en saber cómo aprovechar los ingredientes. Lo que desperdiciamos para una receta nos puede servir perfectamente para otra; la clave es tirar la mínima comida posible y saber aprovechar los alimentos en nuestro favor.

Preparar comida tradicional te ayuda a desarrollar tu ingenio en la cocina y a mejorar tus capacidades culinarias. Tendrás que reinventarte para elaborar distintas recetas con los ingredientes que tengas. Así evitarás preparar siempre lo mismo.

3. Fomenta el desarrollo de las relaciones sociales

La comida tradicional es el máximo exponente de la conocida slow food, un movimiento que apuesta por el disfrute de la comida de una forma consciente y lenta. Las recetas de toda la vida no solo fomentan la conversación en torno a la mesa (o incluso alrededor de los fogones), sino que ayudan a disfrutar lentamente de la comida.

4. Control de las cantidades

La comida precocinada, precalentada o rápida ya viene con unas porciones establecidas que, a veces, son insuficientes o son demasiado, porque no todas las personas comemos igual. Cocinar en casa te ayudará a controlar las cantidades y las porciones, y te dará la posibilidad de guardar para otro día la comida que te sobre.

La cocina tradicional de España

La comida tradicional tiene una serie de ingredientes clave y recetas características en cada parte de España, pues en todos los lugares no se preparan exactamente las mismas recetas y, por supuesto, no se elaboran de la misma forma. Por ejemplo, no se prepara igual el cocido en Madrid que en Andalucía ni las migas son un plato tradicional que se cocine en todo el país. Sin duda alguna, seguir fomentando la preparación de las recetas tradiciones y su inclusión en la dieta no solo es saludable, sino que nos ayuda a mantener nuestra identidad como pueblo.

A modo de pequeño recordatorio, te comentamos algunas de las recetas tradicionales más típicas de España. Muchas de ellas, como ya hemos dicho, se preparan a lo largo y ancho de todo el país, pero cada región les aporta un toque diferenciador: paella, pulpo a la gallega, zarangollo murciano, escalibada, gazpacho andaluz, cocido, alubias, marmitako, patatas a lo pobre, caldereta de pescado o de carne, gofio escaldado, callos, gazpacho manchego, pisto, migas, etc.

Como ves, las posibilidades en cuanto a recetas e ingredientes variados para cada plato son muchísimas, pues la cocina tradicional de España es muy rica y diversa. Además, siempre es nutritiva y tiene muchísimas propiedades beneficiosas.

Esperamos que gracias al artículo hayas podido conocer algunos de los beneficios más importantes de la comida tradicional. Hemos hablado de la rica gastronomía española y de sus amplias posibilidades en lo referente a los platos tradicionales. Si a ti también te gusta este tipo de comida, apuesta por los productos nacionales de toda la vida y comienza a preparar las recetas más ricas.